Usted está aquí: lunes 24 de noviembre de 2008 Política CDI y Cocopa, sin altura para retomar el diálogo con EZLN: López Bárcenas

■ Subraya el abogado oaxaqueño el poco interés político del gobierno en el tema

CDI y Cocopa, sin altura para retomar el diálogo con EZLN: López Bárcenas

Matilde Pérez U.

Ni la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) ni la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) tienen la altura política para retomar el diálogo con el EZLN ni con los pueblos indígenas que se sumaron a la lucha por el reconocimiento de sus derechos, sostuvo Francisco López Bárcenas, abogado integrante del movimiento indígena de Oaxaca.

El descontento que se generó con la reforma constitucional en 2001 continúa, y ahora –con la discusión sobre propiedad intelectual, bioprospección, el comercio internacional y la afectación de los recursos genéticos por los organismos genéticamente modificados, como el maíz– es más que evidente por qué no se reconocieron territorios indígenas, expresó.

“La legislación sigue muy atrás de las demandas de los pueblos indígenas, de los compromisos internacionales firmados por el gobierno y, sobre todo, de los derechos de los pueblos indígenas”, comentó el también colaborador de La Jornada.

Han pasado 12 años desde los acuerdos de San Andrés; entonces se dijo que lo allí plasmado “era lo mínimo que se podía aceptar”; ahora han surgido muchos temas que ni por equivocación están en dichos acuerdos; por ejemplo, el reconocimiento a los recursos genéticos, el conocimiento tradicional y la propiedad intelectual. Por eso ahora hay que revisar nuevamente la normatividad constitucional, sostuvo en entrevista.

Si hubiera interés político del gobierno por atender las demandas de los pueblos indígenas y del EZLN se “tomarían en serio sus demandas”, y por el Legislativo sería la comisión política la que tendría que retomarlas y discutirlas, como ocurrió con la reforma petrolera, por ser un tema toral para la nación.

Los pueblos indígenas tienen más derechos reconocidos por los acuerdos que ha firmado el gobierno en cuanto a derecho internacional, que en el ámbito interno. “Ésa es la contradicción del Estado, porque en lo externo reconoce muchos derechos, no así en lo interno; por eso las demandas que enfrentará será ante tribunales internacionales, entre ellos la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.”

Mientras, la presidenta de la Cocopa, Martha Cecilia Díaz Gordillo, aceptó que las causas del levantamiento indígena siguen vigentes, por lo que la comisión bicamaral trabaja en el marco legal secundario del artículo segundo constitucional, con el que se dará respuesta a “muchos de los temas planteados en los acuerdos de San Andrés.

“El diálogo entre gobierno y EZLN desde hace casi una década está suspendido, pero creo que éste se construye de muchas formas; no nos hemos quedado únicamente en la espera de que cualquiera de las partes dé el primer paso”, aseguró.

Explicó que la Cocopa concluyó un diagnóstico actual en torno a los pueblos indígenas, ya que las situaciones política y social se han transformado. “Acordamos realizar el diagnóstico del EZLN y ver los avances legislativos desde 1994 a la fecha, los impactos de los acuerdos de San Andrés, qué temas se retomaron y cuáles quedaron al margen de la ley; cómo se aplica el artículo segundo constitucional (antes cuarto) para saber en qué punto estamos y qué nos hace falta”.

Agregó que a dicho diagnóstico se sumará el que presente un grupo de especialistas de El Colegio de México considerando los aspectos religioso, económico, agrario, social y político. “Ello nos servirá de insumo para plantear al Ejecutivo federal una de las partes de las grandes líneas de estrategia y de atención a un levantamiento cuyas causas siguen presentes. El hecho de que no tengan una movilidad o una acción violenta no quiere decir que las causas del levantamiento no sigan vigentes y, por tanto, hay que aportar los elementos para la cercanía y volver diálogo”, abundó.

Puntualizó que el trabajo con el Colmex será presentado en marzo próximo y servirá para volver a proponer algunas vías de diálogo. En el marco legal, reiteró, hay que trabajar en el marco secundario del artículo segundo constitucional; “lo estamos trabajando con todos los partidos, aunque no es fácil. Creemos que no tenemos que dejarlo todo en un marco constitucional, porque tendríamos un segundo constitucional imposible de adecuar a una realidad; lo que queremos es un paraguas por eso la convocatoria a los congresos locales para que avancen en la tarea de legislar en materia indígena”.

 
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