■ La avioneta en que se accidentaron fue localizada en una zona montañosa de Ojinaga
Confirman la muerte de los dirigentes de la Comisión de Límites y Aguas México-EU
■ El hallazgo se dio mediante acciones conjuntas entre elementos de la Sedena y la Patrulla Fronteriza
Ciudad Juárez, Chih., 17 de septiembre. El consulado de Estados Unidos en Ciudad Juárez y la Comisión Internacional de Límites y Aguas de México-Estados Unidos (CILA) confirmaron la muerte de los dos principales funcionarios de este organismo y otras dos personas, que viajaban en la avioneta que se estrelló en un sector montañoso de Ojinaga, Chihuahua, limítrofe con Presidio, Texas.
En la aeronave, reportada como desaparecida desde la mañana del lunes, viajaban Arturo Herrera, titular mexicano de la CILA; su contraparte estadunidense, Carlos Marín; Jake Brisbin, director ejecutivo del Consejo del Río Grande Council, y el piloto Matthew Mat Juneau.
Silvio González, vocero del consulado estadunidense, informó “que las labores de rescate comenzaron este miércoles temprano, pero se tiene la seguridad de que no hubo sobrevivientes”.
La avioneta Cessna 421 trasladaba a los funcionarios a la zona limítrofe entre Presidio y Ojinaga, para supervisar el área afectada por las inundaciones provocadas por el desbordamiento de los ríos Conchos y Bravo.
Sin embargo, el piloto reportó un problema técnico y la avioneta desapareció de los radares. A partir de ese momento, personal especializado de autoridades de ambos países comenzó la búsqueda.
La Secretaría de Relaciones Exteriores informó que la avioneta fue encontrada la mañana de este miércoles en territorio mexicano, cerca de la frontera con Estados Unidos, en un punto ubicado a 37 kilómetros al noroeste de Ojinaga, y 21 kilómetros al sur del río Bravo.
En un comunicado, la dependencia señaló que el hallazgo fue resultado de la acción conjunta de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.
En Washington, el embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán, lamentó “profundamente” el fallecimiento de los funcionarios.
Indicó que los comisionados de México y Estados Unidos ante la CILA, Arturo Herrera y Carlos Marín, respectivamente, fueron “dedicados funcionarios que murieron trágicamente en el cumplimiento de sus labores”. A través de un comunicado, lamentó también el deceso de los otros dos ocupantes de la aeronave.
Herrera era oriundo de la ciudad de México y egresado del Instituto Politécnico Nacional y la Universidad Nacional Autónoma de México. Fue designado comisionado del CILA en 1989 y colaboraba en el organismo desde 1982.