Quiebra IETU a las empresas: Canacintra
El número de personas en de la economía informal es similar al de los trabajadores registrados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de unos 12 millones de mexicanos, aseguró el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), Miguel Marón Manzur.
Denunció que la economía ilegal, que significa 20 por ciento del producto interno bruto nacional, genera preocupación en los industriales porque afecta a sectores como los de calzado, libros, vestido, lubricantes, entre otros, que representan ventas anuales por 13 mil millones de dólares.
El dirigente empresarial opinó que “cualquier estrategia eficaz de combate al comercio ilegal debe ser ante todo socialmente incluyente” y debe establecer la recuperación del mercado interno.
“Los sectores productivos y las autoridades federales, estatales y municipales deben desarrollar estrategias que definan políticas públicas” para enfrentar el problema del comercio ilegal, solicitó Marón Manzur.
Destrozado, el sector químico
En su oportunidad, Asael Cisneros, presidente del sector químico de la Canacintra, reclamó al gobierno federal que el Impuesto Empresarial a Tasa Única (IETU) descapitaliza y provoca la quiebra de las empresas. El sector químico está “completamente destrozado; la cadena totalmente rota”, dijo.
La organización hizo un llamado a las autoridades hacendarias para que a las empresas que “por alguna cuestión de tipo administrativo o por desconocimiento en el manejo del pago del IETU no se les cobre recargos ni multas” por el incumplimiento en el primer desembolso provisional para cubrir el gravamen, afirmó Marón Manzur.
El IETU, según el Servicio de Administración Tributaria (SAT), debe efectuarse en “pagos provisionales y declaración anual en las mismas fechas que el impuesto sobre la renta”. Entró en vigor en enero y el primer pago debió realizarse a más tardar el 17 de febrero. El Instituto Mexicano de Contadores Públicos opinó a su vez que el éxito del IETU no puede ser evaluado a partir de la recaudación registrada durante los dos primeros meses del año, como hizo la Secretaría de Hacienda.
“No pondría en duda las afirmaciones del SAT de que en el primer bimestre se recaudó más de lo previsto, pero es muy temprano para hacer cualquier conclusión al respecto y todo apunta a que en el tercer mes se cayó la recaudación. Cuando se diseñó el gravamen se desconocía la crisis que se avecinaba de Estados Unidos, pero no se prevé una catástrofe para la hacienda pública”, dijo Carlos Cárdenas Guzmán, vicepresidente de asuntos fiscales del IMCP.