La franja abandonó el sótano de la tabla de cocientes; se puso arriba de Veracruz y Tigres

Puebla goleó al Morelia y dejó en la cuerda floja la permanencia de Patiño

Monarcas fue una nulidad de principio a fin

Mala actuación del silbante al no marcar un penal contra el cuadro michoacano

El triunfo hizo llorar al técnico camotero Sánchez Solá

Agencias

Puebla, Pue., 24 de febrero. Los Camoteros apalearon 4-0 al Morelia en partido vital para su permanencia en el máximo circuito, pues salieron del sótano de la tabla de cocientes, al ubicarse arriba de Veracruz y Tigres. De paso dejaron en la cuerda floja a David Patiño, técnico de Monarcas.

Lágrimas de felicidad derramó el técnico José Luis Sánchez Solá, lo cual contrastó con la preocupación de Patiño, cuyo equipo recibió la segunda goliza de escándalo, luego del 6-0 ante Chivas, en la fecha tres.

Los visitantes mostraron desconcierto, mala coordinación y nula concentración de principio a fin, ya que apenas al minuto seis el cuadro de casa aprovechó un error de la zaga rival para tomar ventaja en el tablero.

Nicolás Olivera se encargó de coronar con tiro cruzado desde perfil derecho la acción generada luego de un largo pase enviado por Walter Vílchez; el atacante uruguayo superó sin problemas la titubeante marca del defensa Jaime Durán.

El cuadro de la franja dio poco espacio a la reacción del de Michoacán. Se mantuvo atento y generó nuevas opciones, inclusive le fueron anuladas otras dos anotaciones por estar en posición adelantada, lo cual, sin embargo, no menguó sus ímpetus ofensivos.

Tras el descanso intermedio, Monarcas tejió su mejor avance, que culminó con disparo desviado de Aldo Leao, pero tal osadía encontró respuesta instantánea con nuevo bombardeo de los poblanos. El acoso se tornó insoportable, al extremo de que los dirigidos por Patiño jugaron al límite del reglamento.

El árbitro Jaime Herrera no tuvo buena actuación. Permaneció lejos de la pelota y al minuto 45 no marcó una mano y penal contra Morelia.

Al 56 de acción Gilberto Mora dejó ir una opción increíble luego de recibir pase lateral de Híber Ruiz. Dos minutos más tarde por fin el silbante Herrera decretó la pena máxima por descompuesta barrida con los tacones por delante de Mauricio Romero, quien sin embargo no fue amonestado.

Olivera se encargó de concretar el 2-0 con disparo al centro a media altura, mientras el portero Moisés Muñoz cayó en el engaño y se lanzó a la derecha.

En el colmo de la mala suerte, Patiño sacó a Mauricio Martínez para ingresar a Sonny Guadarrama, al minuto 66, quien tras veinte segundos fue enviado a las regaderas al ganarse cartón rojo por aplicar artera patada sobre Walter Vílchez.

Al minuto 63 Híber Ruiz dejó escapar otra gran opción, pues tuvo todo para fusilar a quemarropa, ante marco abierto, pero echó la pelota a un costado.

El tercer tanto cayó a la cuenta del uruguayo Álvaro González, después de un gran avance por la derecha de Sergio Pérez, quien llegó hasta la línea de fondo; localizó al Bola y le remitió un servicio medido; González sólo tuvo que darle colocación para incrustar su remate pegado al poste izquierdo.

En el banquillo los técnicos vivieron al máximo su contrastante situación. Sánchez Solá estaba eufórico y no pudo contener el llanto, mientras el rostro del nervioso David Patiño se vio desencajado.

Como colofón inevitable llegó el cuarto tanto. En tiempo de compensación Mario Ortiz recibió un largo servicio, hizo buena recepción y de media vuelta disparó con potencia para batir de nuevo al arquero Muñoz.

La afición local, que vive junto con su equipo el viacrusis en pos de la salvación, estalló en festejos y salió contenta del inmueble tras presenciar la primera victoria del torneo de su equipo, que hoy resarció con creces los anteriores tres sufridos empates.