Louisiana State, nuevo campeón de futbol americano colegial
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El receptor abierto de LSU, Early Doucet (9), enfrenta a los defensivos de Ohio State Donald Washington (20) y Ray Small, en su camino a la zona de anotación, en la segunda mitad del campeonato de futbol universitario en el Louisiana Superdome, de Nueva Orléans
Foto: Ap
Nueva Orleáns. Los Tigres de Louisiana State conquistaron el título nacional de Estados Unidos, al vencer 38-24 a los Ojos de Venado de Ohio State, que sufrió su segunda derrota consecutiva en este tazón. El encuentro se disputó en el Superdomo de Lousiana, que registró un lleno absoluto. Comandados por el quarterback Matt Flynn, los felinos son, por tercera ocasión en su historia, los número uno de Estados Unidos, en un juego donde su mariscal de campo lució enormidades, al conectar 19 pases de 27 intentos para lograr 174 yardas y cuatro pases de anotación. La Estatal de Louisiana (LSU) se convierte en el primer equipo en ser dos veces campeón en este nuevo formato, donde se decide al campeón en el All State BCS National Championship. Los Tigres iniciaron con mucho nerviosismo y esto lo aprovechó la Estatal de Ohio para aumentar su ventaja en el marcador, cuando Ryan Pretorius conectó gol de campo de 26 yardas para poner el juego 0-10 en el primer cuarto de juego. Después de un inicio incierto, los Tigres despertaron de su letargo y le dieron la vuelta al marcador y se colocaron 31-10, para terminar con la victoria por 38-24. Esta es la tercera ocasión que LSU conquista el título nacional, la primera fue en 1958, cuando venció en un dramático juego 7-0 a la Universidad de Clemson, y más recientemente en 2003, al derrotar en el juego por el título nacional 21-14 a los Sooners de Oklahoma. Chris Wells, de Ohio, tuvo una gran actuación al correr para 146 yardas en 20 acarreos, uno de ellos para abrir el marcador en el primer cuarto en una espectacular escapada de 65 yardas, pero para su mala fortuna, más tarde no pudo hacer nada para evitar la derrota de su equipo. Antes del encuentro Ohio State estaba considerado como el equipo número uno de la nación, y Lousiana era el número dos.