Usted está aquí: sábado 23 de junio de 2007 Mundo Ataque aéreo de la OTAN en Afganistán provoca la muerte de 25 civiles y 20 talibanes

Admite la alianza atlántica "error" que acabó con 12 miembros de una familia

Ataque aéreo de la OTAN en Afganistán provoca la muerte de 25 civiles y 20 talibanes

REUTERS, AFP, DPA

Kandahar, 22 de junio. Un ataque aéreo llevado a cabo por la Fuerza de Asistencia de Seguridad Internacional (ISAF), a cargo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), dejó 25 civiles muertos, entre ellos 12 integrantes de una familia, y 20 talibanes en el sur de Afganistán, hecho que será investigado, informó el secretario general de la alianza, Jaap de Hoop Scheffer.

El jefe de policía de la provincia de Helmand, Hussien Andiwal, explicó que la incursión se produjo el pasado jueves por la noche como parte de una operación contra militantes talibanes en la que participan fuerzas extranjeras y afganas.

Entre los afganos muertos se encuentran nueve mujeres y tres bebés, informó Hussein Andiwal, quien añadió que el bombardeo se produjo luego que milicianos talibanes atacaran un convoy de la ISAF desde casas y jardines del pueblo.

Un portavoz del ejército de Estados Unidos se negó comentar sobre el operativo realizado por la ISAF, pero la OTAN, que comanda una misión separada, confirmó que llevo a cabo el ataque aéreo después que fuerzas de la alianza atlántica fueron atacadas por los insurgentes.

"Esto ocurre y siempre es dramático, esto ocurre, desafortunadamente", expresó el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, en conferencia de prensa en la ciudad canadiense de Québec.

El jefe de la OTAN pidió que se inicie una investigación de la muerte de los 25 civiles en el bombardeo, que calificó de "error". Añadió que "es importante evitar equivocaciones porque tenemos que seguir apoyando a la mayoría de la población afgana", e instó a poner en marcha una "investigación seria" sobre el incidente.

El incidente se produce en medio de la creciente violencia de los últimos 17 meses, el periodo más sangriento desde que los talibanes fueron derrocados en 2001, después de la invasión liderada por Estados Unidos tras los atentados del 11 de septiembre de ese año.

Más de 230 civiles han muerto este año en operaciones de las fuerzas extranjeras y afganas, según recuento de grupos humanitarios presentes en el país.

Las muertes de civiles son cuestión delicada para el gobierno de Hamid Karzai y para las tropas extranjeras que buscan a los talibanes y sus aliados. En los últimos meses se han producido varias manifestaciones de protesta por esas víctimas.

 
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