Usted está aquí: lunes 15 de enero de 2007 Estados Logra la UAS reproducir guacamaya en cautiverio

Protege en su aviario especie en peligro de extinción

Logra la UAS reproducir guacamaya en cautiverio

Sinaloa, Oaxaca y Nayarit, focos rojos del tráfico de aves

Firman convenio con minera para proteger reserva natural

JAVIER VALDEZ CARDENAS CORRESPONSAL

Culiacán, Sin., 14 de enero. La Escuela de Biología de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) tiene el segundo aviario más grande del país, después del Zoológico Del Toro, en Chiapas, y ha logrado reproducir en cautiverio la guacamaya verde (Ara militaris), especie que está en peligro de extinción, informó Yamel Rubio Rocha.

La integrante del cuerpo académico de Ecología, Ambiente y Conservación, que coordina el proyecto del Mineral de Nuestra Señora de la Candelaria, en el municipio de Cosalá, señaló que esta especie está amenazada por el tráfico de aves.

La guacamaya nació en el zoológico de Culiacán con el apoyo del cuerpo de veterinarios de esta institución y de especialistas de la UAS. De tres huevos, sólo se logró uno.

''Sinaloa tiene una alta incidencia de tráfico de aves, pero hay un aviario viable y el equipo de trabajo está rindiendo frutos'', sostuvo.

De seguir avanzando la reproducción de la guacamaya en cautiverio, agregó, el próximo año podrían lograrse de cinco a siete crías y un promedio de siete en los años siguientes. El siguiente paso será la reintroducción de estas aves a su hábitat natural, que es una de las etapas más caras y riesgosas de este programa.

''Esta es la primera vez que un aviario de un centro educativo, como es nuestra universidad, logra que una especie que está en peligro de extinción se reproduzca en cautiverio. Sabemos que no es un hito noticioso, pero es impactante en términos educativos, científicos y de conservación ambiental".

El aviario

El programa de reproducción y reintroducción de la guacamaya verde se inició el 8 de junio de 2004 en el predio del Mineral de Nuestra Señora, que se ubica en Cosalá, con la apertura del aviario, aunque los trabajos avanzaban desde 2003. Empezaron con 23 guacamayas decomisadas por las autoridades federales y que estaban en el zoológico de Culiacán.

Además del zoológico, participan en este programa la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) por conducto del Instituto de Ecología, la asociación civil Pronatura, el ayuntamiento de Cosalá y el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza.

El aviario, de 33 metros por 12, tiene árboles de higueras, guásimas y otras especies que favorecen la reproducción y sobrevivencia de los animales. Para la reinserción de la guacamaya verde se tendrá la asesoría de la experta Catherine Rentan, de la UNAM.

Persiste la amenaza

Rubio Rocha, ex directora de la Escuela de Biología de la UAS, afirmó que la guacamaya verde ha sido declarada especie protegida en todo el mundo y su comercialización está prohibida; sin embargo, sigue amenazada por traficantes que han mermado las poblaciones.

La distribución de esta especie va desde Sonora hasta Oaxaca y el centro del país, pero actualmente sus núcleos poblacionales son muy pequeños y fragmentados (hasta 60 guacamayas), y en Sinaloa se encuentran en los municipios de Cosalá, San Ignacio y El Fuerte, explicó.

Las principales amenazas, sostuvo, son la destrucción de su hábitat, sobre todo por la agricultura de temporal y la deforestación de bosques tropicales secos (donde empieza la serranía), y el tráfico de especies. Cada ave se vende hasta en 10 mil pesos en el mercado negro.

Agregó que Sinaloa, al igual que Nayarit y Oaxaca, son estados de alta incidencia de tráfico de aves.

En el país existen 22 especias de psitácidos (al que pertenece la guacamaya verde); siete se encuentran en Sinaloa y cinco en la reserva ecológica del Mineral de Nuestra Señora de la Candelaria.

Un paso, el convenio con la minera

Yamel Rubio calificó de positivo el convenio logrado entre las autoridades de la UAS y la empresa minera canadiense Scorpio, con la intervención de las autoridades estatales, pero lamentó que el plantel no haya sido tomado en cuenta en este acuerdo.

El convenio tampoco les fue mostrado y a pesar de ello la reserva sigue operando normalmente.

Sólo el año pasado recibieron alrededor de mil visitas, principalmente en el aviario y el laboratorio natural.

''Estamos trabajando y tenemos un plan de manejo universitario que nos ha dado resultados, aunque tenemos necesidad de más recursos estatales y de la universidad'', expresó.

Después de 41 años y 15 rectorados, autoridades de la UAS y de la minera Scorpio firmaron un convenio que permite el reinicio de la explotación de recursos naturales en la zona serrana del municipio de Cosalá, en la región conocida como El Mineral de Nuestra Señora.

El convenio prevé la creación de un fideicomiso que iniciará con 50 mil dólares que aportará la empresa minera, y una renta mensual de 5 mil dólares.

Los objetivos de este acuerdo son promover el desarrollo de la reserva ecológica creada en la UAS ­que anteriormente estaba en riesgo­, promover el turismo alternativo en la región y el mejoramiento de las condiciones de vida de los campesinos cosaltecos.

El convenio también incluye la aportación de 100 mil dólares por parte de la minera que para construir un inmueble en el que operará la preparatoria Heraclio Bernal de esta casa de estudios.

 
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