Usted está aquí: jueves 16 de noviembre de 2006 Espectáculos Glamur y sátira política en el concierto de los Pet Shop Boys

El Auditorio Nacional se convirtió en un antro techno sacudido por el baile

Glamur y sátira política en el concierto de los Pet Shop Boys

El grupo abrió su presentación con I'm with stupid, crítica a la relación entre George Bush y Tony Blair

Vaqueros con ropa plateada y lentejuela brillaron en la segunda parte del show

ARTURO CRUZ BARCENAS

Ampliar la imagen Neil Tennant y Chris Lowe, los Pet Shop Boys, durante su presentación en el Auditorio

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En su concierto del pasado martes, en el Auditorio Nacional, Pet Shop Boys (PSB) cantó una sátira inspirada en la relación entre el primer ministro británico Tony Blair y el presidente estadunidense George W. Bush. Se titula I'm with stupid, que en dos estrofas dice: "Nadie me entiende de dónde vengo. ¿Por qué estaría con alguien que obviamente es tan tonto? Antes de conocernos pensé, como todos los demás, que eras sólo un idiota, un niño de billón de dólares. Volaste todo el camino como un halcón persiguiendo una paloma. Nunca pensé que yo sería un sacrificio de amor".

En el escenario, en una gran pantalla que se desplegó y cerró varias veces durante el concierto, dos figuras representaron a los personajes. Sus altos cuerpos denotaban las banderas de Inglaterra y Estados Unidos. Un grito colectivo remató esa imagen y un sonido machacón que hacía imposible quedarse quieto.

El foro de Reforma, lleno de anhelantes de la música vinculada a la luz de neón, iridiscente, enceguecedora. A las 20:45 el intro de Psychological reveló el concepto sonoro y visual. En una gran mampara dos figuras estilizadas, las de Neil Tennant y Chris Lowe. Uno con bombín, el otro con gorra.

"Buenas noches, México. Somos los Pet Shop Boys. Bienvenidos a la noche del entretenimiento electrónico", dijo Tennant.

Lo fundamental

Los PSB difunden ahora su disco Fundamental, que en conferencia de prensa, realizada el pasado lunes, definieron el título como una palabra que alude a los fundamentalismos de hoy, pero también a lo fundamental, que es el sonido que han desarrollado a lo largo de 25 años de carrera.

Fundamental es considerado su mejor disco de estudio. El sencillo I'm with stupid y el álbum anuncian un periodo de actividad intensa que incluye la publicación de Pet Shop Boys Catalogue, que es la historia visual completa del dueto, editada por Philip Hoare y Chris Heath.

Fundamental es el noveno álbum de PSB que los reúne con el productor Trevor Horn, quien trabajó con ellos en la canción Left to my own devices, de 1988. El disco fue grabado en Londres e incluye 12 piezas: 11 composiciones nuevas de Tennant/Lowe más Numb, escrita por Diane Warren.

Con sus 25 años de historia y absolutamente vigentes, este martes mostraron la fuerza de la estética gay, con vaqueros de tela plateada bailando break dance o recostados, con las piernas cruzadas, en un sofá muy chic.

Suburbia, Can you forgive her?, Minimal, Shopping, Rent, hasta la solemne Dreaming of the Queen, dedicada a la princesa Diana, con imágenes de los funerales, con el recorrido de la carroza y el pueblo arrojando flores que rebotaban en el vehículo.

Opportunities deja sentir el poder del sintetizador. La electrónica permite una austeridad instrumental, pero una riqueza y versatilidad que se reproduce en miles de salones de baile. Los PSB convirtieron el Auditorio Nacional en un enorme antro, donde miles de asistentes asumieron la actitud típica: por momentos sólo parados, con las manos en los bolsillos, y de repente la explosión de ritmo expresada en la danza.

Tras un intermedio de 20 minutos, en el que cientos de parejas de todas las tendencias y preferencias, o grupos de amigos, se dirigieron a tomar algún trago, vino lo mejor de todo. El ritmo y el poder de la tecnología, la vibra melódica, el sonido que envuelve, que va subiendo en velocidad.

El show electrónico

La electrónica requiere de eso que los exquisitos llaman glamur.

Jóvenes coristas y bailarines ejecutan pasos casi circenses. Al cantar Heart, el beat electrónico emociona. Los cuerpos crean una geometría presa del voyerismo. Soy si soy visto en la multitud. Street no name, para el recuerdo de U2, de Bono, de los sombreros de los vaqueros, pero acá con estética de lentejuelas. West end girls y Sodom and Gomorrah para llevar al clímax. El público, que no ha estado de pie a lo largo de todo el concierto, ahora menos.

El encore con So hard e It's a sin. La noche, las desveladas, el sexo, la sensualidad, el hilo de sudor recorriendo la espalda.

Go West para el final feliz, el único, el imperdonable. Un auténtico clásico.

Hoy estarán en Monterrey para seguir alimentando su leyenda. El martes pasado, Chris Lowe expresó: "Desde hace 25 años, cuando nos metemos a un estudio, lo que buscamos es llevar ideas nuevas para componer con la frescura del primer día, y ese es el secreto que nos ha mantenido juntos. Nuestra carrera nunca se nos ha hecho aburrida. Quizá en eso nos parezcamos un poco a Duran Duran".

Reconocieron que el pop es actualmente uno de los géneros más competitivos.

Sobre la ley de convivencia establecida en México que legaliza los matrimonios gays, Tennant dijo que "si es buena está bien".

 
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