Usted está aquí: sábado 28 de octubre de 2006 Sociedad y Justicia Caos en el aeropuerto capitalino

Caos en el aeropuerto capitalino

Anoche, desde las 19 horas comenzó a registrarse un caos en el servicio de transportación de pasajeros en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Filas de más de 600 personas esperaron más de 2 para abordar los vehículos del sitio 300, que tiene en exclusiva el servicio a viajeros en la terminal aérea.

En las ventanillas continuaba la venta de boletos para trasladar a las personas que seguían arribando al AICM, no obstante la aglomeración, pero les hacían saber que en caso de no utilizar el servicio, podrían utilizar sus contraseñas hasta por 15 días.

Inspectores de la terminal aérea discutían con los taxistas que tardaban en regresar de los servicios más tiempo del debido, lo que provocó que cada vez existiera mayor número de pasajeros desesperados.

Entrevistado vía telefónica, Enrique Salinas Banda, secretario de la organización del sitio 300, informó que la falta de unidades obedeció a que durante toda la tarde llovió intensamente en diversas partes del Distrito Federal, por lo que al llevar pasajeros a sus destinos, perdieron entre 30 y 40 minutos para poder regresar al AICM por el intenso tráfico vehicular que congestionó diversas vialidades.

Salinas Banda aceptó la falta de coches por la tarde y que esto se ha convertido en un problema, debido a que hay un déficit de taxis a esas horas. Afirmó que la reunión que tuvieron durante la tarde los permisionarios del sitio 300, a la que fueron convocados para analizar la posibilidad de aumentar el número de operarios -dos por vehículo- que conduzcan los coches que comunmente no trabajan las 24 horas, lo que aceptarán como una medida de emergencia por los problemas que se han vivido por las intensas lluvias en la capital.

Sin embargo, la mayor parte de los permisionarios se negó a poner en práctica la propuesta de sus líderes, ya que no quieren que sus carros sufran mayor desgaste por exceso de uso.

Un dato curioso fue la presencia de choferes piratas, tolerada por los inspectores de la AICM, quienes trasladaban a los pasajeros que no querían seguir esperando por más tiempo el servicio. "Este es un valor entendido para poder atender a las personas que llevan horas esperando", dijo Salinas Banda, quien de manera permanente ha protestado ante las autoridades aeroportuarias porque no se combate a los choferes piratas, y que ahora al no poder ellos cubrir el servicio, aceptaban que brindaran el servicio.

Triunfo Elizalde

 
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