Usted está aquí: martes 10 de octubre de 2006 Política Moya Palencia se lleva a la tumba el secreto de su papel en el halconazo

Pese a denuncias, fue exculpado de la matanza del jueves de Corpus de 1971

Moya Palencia se lleva a la tumba el secreto de su papel en el halconazo

Fue titular de Gobernación y embajador; ser magistrado del TEPJF, su última aspiración

Ampliar la imagen Mario Moya Palencia, ex secretario de Gobernación de Luis Echeverría, en imagen del pasado 6 de julio Foto: Ap

Mario Moya Palencia se llevó a la tumba el secreto de su participación, como secretario de Gobernación de Luis Echeverría Alvarez (1970-1976), en el halconazo del 10 de junio de 1971, donde murieron 12 estudiantes.

Aunque legalmente fue exonerado por la justicia federal del delito de genocidio, su participación en la conformación y actuación del grupo paramilitar los halcones, que reprimió la marcha pacífica de estudiantes ese jueves de Corpus, no quedó esclarecida, pese a que tanto él como Echeverría Alvarez fueron señalados en 2005 por la Fiscalía Especializada en Movimientos Sociales y Políticos del Pasado como los principales responsables de la matanza con la que se pretendía exterminar a un "grupo nacional" de estudiantes.

Sin embargo, el 26 de julio del año pasado, la juez Antonia Herlinda Velasco consideró que la matanza del 10 de junio no había constituido un "genocidio", sino un "enfrentamiento", y se negó a girar las órdenes de aprehensión solicitadas por la fiscalía, fallo duramente criticado por organizaciones defensoras de derechos humanos y familiares de las víctimas.

Nacido en la ciudad de México en 1933, el ex responsable de los órganos de seguridad del Estado y de la política interna, quien murió ayer de un paro cardiaco, había presentado hace unas semanas su solicitud ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para ser tomado en cuenta y formar parte de las seis ternas que el pleno del máximo tribunal enviará al Senado de la República para que éste elija a seis magistrados de la sala superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Sin embargo, en el proceso de selección Moya Palencia no obtuvo ni un voto de alguno de los 11 ministros que integran el pleno.

Abogado de profesión por la Universidad Nacional Autónoma de México, Moya Palencia militó en el Partido Revolucionario Institucional desde muy joven y llegó al punto más alto de su carrera política en 1976, cuando figuró como uno de los tapados a la candidatura de su partido a la Presidencia de la República, sin embargo, esa postulación la perdió frente a José López Portillo.

En 1985 inició su carrera como representante de México en el exterior, cuando ocupó el cargo de representante permanente de México ante la Organización de Naciones Unidas hasta 1989; después se convirtió en embajador extraordinario y plenipotenciario ante el gobierno de Cuba (1991-1993) y luego encabezó misiones diplomáticas diversos en países de Centroamérica y el Caribe, hasta que fue nombrado nuevamente embajador, en Italia.

"Hombre fuera de serie"

Por la tarde, Moya Palencia fue trasladado al Panteón Francés. Hasta su féretro llegaron algunos de los viejos políticos que compartieron con él parte de la historia del país. Hoy serán cremados sus restos.

Otrora priísta, Porfirio Muñoz Ledo destacó la labor diplomática del ex secretario de Gobernación, y junto con él el ex senador Manuel Bartlett, el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México Guillermo Soberón, el ex procurador General de la República Sergio García Ramírez y el ex gobernador de Veracruz, Miguel Alemán, quien lo calificó de "hombre fuera de serie".

Mientras, el embajador de Cuba en México, Jorge Bolaños, presentó sus respetos ante quien, dijo, fue un "gran embajador en La Habana". Se sumó al pésame Víctor Lichtinger, ex secretario del Medio Ambiente en el gobierno foxista, y Rodolfo Echeverría.

Otros políticos optaron por enviar solamente un arreglo floral; tal fue el caso del presidente del Senado, el priísta Manlio Fabio Beltrones, entre otros.

 

Jesús Aranda y Ciro Pérez

 
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