Usted está aquí: viernes 1 de septiembre de 2006 Opinión Astillero

Astillero

Julio Hernández López

No leer

El Informe, pretexto para militarizar

Provocación institucional televisable

Pláticas de césped en el Poli

El hombre que recomendaba a los mexicanos no leer, para así ser felices, ahora se empeña en incursionar militarmente en la Cámara de Diputados para deletrear un informe de gobierno absolutamente prescindible. Pero no es que el hijo de Ohio (procure el lector pronunciar bien el nombre de esa entidad gringa) hubiese sido tocado de pronto por alguna varita mágica y se hubiese convertido en promotor de la lectura o aspirante a intelectual al ajo firmante. Lo que sucede es que the president of the United States of Mexico está aprovechando la anunciada oposición activa de legisladores perredistas a la conducta ominosa de Míster Fox y a su ritual leedor anual para instalar, sin declararlo oficialmente, un estado de sitio ni más ni menos que en torno a un Poder Legislativo así secuestrado (¡oh!, ¿no hubo intelectuales que protestaran por ese secuestro militar?, ¿los arrestos críticos sólo alcanzan para asuntos viales, esos sí peligrosísimos para México?) y, además, para preparar las batidas de represión que reinstauren el "orden" necesario para imponer a Felipe Calderón como presidente electo.

Míster Fox es la carnada para la represión. Lo de menos es leer o no leer un informe inodoro que bien podría ser excusado (es decir, que hubiese excusa para sólo presentarlo por escrito), pues lo importante para el jefe de la provocación institucional es llevar a sus adversarios a escenarios extremos de violencia que den material para pautas publicitarias por televisión que muestren a la nación programadamente atemorizada los riesgos de que siga adelante la resistencia al fraude electoral. Míster Fox es la pieza (desgastada) de sacrificio que desea (mártir de la democracia) correr los riesgos de ir a la iglesia de San Lázaro a llevar flores informativas, en espera de que su conducta debota (es decir, calzada al estilo vaquero) al ser rechazada por los violentos miembros de la amenaza amarilla le permita enseguida ir a los santuarios televisivos a difundir un lastimero mensaje en cadena nacional.

El saldo concreto del episodio del sexto Informe ha sido la militarización de la política. Hoy, como en décadas anteriores, hay reportes de grupos entrenados para "disuadir" manifestaciones, y el plantón de Reforma y el Zócalo es rondado por jóvenes que apenas disfrazan su condición castrense. Hay ciudadanos que han reportado a esta columna que "policías" federales recorren calles tomando nota de las direcciones en que hay propaganda a favor de López Obrador. Y en Internet se han multiplicado mensajes como el que, con la dirección [email protected], plantea: "Un gobierno que hace cumplir la ley con la FUERZA, no es un gobierno represor, es un gobierno RESPONSABLE. ¡ACTUEN YA! Atentamente, LA LEY". Y en Oaxaca aparece una decena de guerrilleros que obviamente da pie a la histeria inducida de los medios de comunicación uniformados y a que se "justifique" la mano dura allá, en la capital del país y en todo foco de "insurrección" o "subversión".

Felipe Solitario visita mientras tanto el municipio Emiliano Zapata en Morelos. Lo acompaña el fundador del movimiento católico Testimonio y Esperanza (organizador de rosarios masivos, promotor de visitas al Cerro del Cubilete para honrar a Cristo Rey), Marco Antonio Adame, que ahora es gobernador electo de esa entidad. El zapatismo cristero se reúne en lo que fue una hacienda, donde hay ríos artificiales y cascada. Junto a ellos está el presidente municipal (¿San?) Martín Caballero. Hasta allá llega la noticia de que el IFE denuncia compra de votos y coacción a los electores el pasado 2 de julio, pero (¡milagro!) es el IFE de Oaxaca y la acusación va contra Ulises Ruiz.

Lecturas en Braille de una realidad digitalmente modificada. Engaño cada vez más claro: entre más violencia y encono haya es posible que menos visibles queden la injusticia, la corrupción, el entreguismo, la imposición y el fraude de una pandilla cuyo jefe formal siempre quiso acostumbrar a los mexicanos a no leer (a no ver, a no entender).

Astillas

Cinco de los seis consejeros electorales del IFE en Querétaro emitieron ayer un pronunciamiento en el que mencionaron que "a pesar de la buena voluntad que pudieron tener los funcionarios de casilla, la elección no fue la caja de cristal que algunos grupos de interés se empeñan en pregonar" y criticaron la campaña mediática del IFE que busca "a base de mensajes repetidos, convencer a la ciudadanía de que la elección fue impecable". Leticia Blanco, Yolanda Elías Calles, Isabel Martínez, Demetrio Juaristi y Flavio Lazos, consejeros electorales, confían en que haya una nueva ley electoral y que se renueve "el papel del IFE, actualmente atrapado por el régimen de partidos, para garantizar que nuestras autoridades se deban únicamente al pueblo, a la nación, y no a intereses facciosos"... Sí hubo plática en el Poli. Fue en el césped, frente a una cafetería, aunque profesores de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) ya habían dispuesto por su propia iniciativa ("expropiado", dijo un catedrático, sonriente) que uno de los auditorios pudiese ser utilizado. Junto con el tecleador, unas 300 personas se arriesgaron a ser acusadas de delincuencia electoral, conforme a la circular 005, firmada el 17 del presente por Efrén Parada, secretario general del IPN, quien, "por instrucciones" del director Enrique Villa Rivera, hizo saber a las autoridades de ese instituto que, dado que "aún no ha concluido el proceso electoral federal" sigue vigente la instrucción "relativa a la abstención del uso de bienes inmuebles o recursos en general propiedad de esta institución con fines electorales" (la abstención significa que nadie pueda pegar un cartel o anuncio en paredes, pizarrones colectivos o sitio similar, y que todo aquello que signifique hablar o escribir sobre el tabú "elecciones" sea sistemáticamente obstruido. Claro, Canal 11, bien público actualmente bajo posesión de Marta Sahagún, mediante su ahijado Julio Di Marta, perdón, Di Bella, día tras día acomoda su programación informativa a los intereses electorales del PAN y del gobierno federal). El subteniente Parada reiteró, además, que "el incumplimiento de la normatividad de referencia" pasará a las instancias internas del IPN, pero también "de otras autoridades laborales, administrativas y de investigación de delitos electorales del orden federal"... ¡Y, por hoy, es todo!

Fax: 5605-2099 * [email protected] * www.juliohernandez.com.mx

 
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