Denuncia abogada abusos sexuales de agentes contra tres adolescentes

Destituye Bachelet a jefe policial que ordenó reprimir a estudiantes

"Indignada", la presidenta de Chile por la brutal agresión; "legítimas, sus demandas", afirma

Soluciones o habrá más movilizaciones junto con trabajadores, advierten líderes estudiantiles

ENRIQUE GUTIERREZ CORRESPONSAL

Santiago, 31 de mayo. La presidenta Michelle Bachelet expresó hoy su "indignación" por la brutal represión policial en contra de estudiantes de secundaria, que afectó además a varios periodistas que resultaron apaleados, hechos que culminaron la víspera con unos 730 detenidos y decenas de heridos.

En ese contexto, el gobierno se vio obligado a destituir al jefe de la unidad directamente responsable de la represión, mientras que los estudiantes mantenían por segundo día consecutivo el paro nacional y emplazaron a las autoridades a resolver sus demandas en 48 horas o lanzarán una movilización social con la incorporación de trabajadores.

"No aceptaremos hechos repudiables como los que hemos visto el día de ayer", señaló la mandataria socialista, tras calificar de "legítimas" las demandas de los estudiantes en su reclamo de una reforma educacional. Ante esta condena, la policía removió al jefe de la unidad de fuerzas especiales que ordenó la represión.

Bachelet convocó a una reunión al director de la policía de Carabineros, general José Bernales, quien tras salir del palacio de la Moneda anunció, visiblemente molesto, la destitución del jefe de las fuerzas especiales, coronel Osvaldo Jara. Pero éste dijo "no arrepentirse" pues cumplió "profesionalmente" con su desempeño.

"Para nuestro gobierno es muy importante que se pueda ejercer la libertad de expresión, es por eso que hemos expresado nuestra indignación, tanto por los hechos acontecidos con periodistas y camarógrafos como con los estudiantes que sufrieron un exceso, un abuso, una violencia repudiable e injustificable", dijo Bachelet.

Subrayó que la tarea de carabineros es "resguardar la seguridad, pero no aceptaremos hechos repudiables como los vistos por todos los chilenos en el día de ayer", pues los policías deben atenerse al estado de derecho.

La mandataria estuvo acompañada del presidente del Colegio de Periodistas, Alejandro Guillier, quien manifestó que interpondrá una querella criminal en contra de quienes resulten responsables de las agresiones sufridas por algunos de colegas y que se espera una reparación por el daño material y moral causado.

En cuanto al diálogo de su gobierno con los estudiantes, que se reanudó este día en un ambiente tenso, Bachelet calificó de "legítimas" las demandas de los jóvenes, a quienes describió con "conciencia de sus derechos" y, resaltó, tienen la misma edad que "esta democracia", en alusión a los 16 años que lleva en el gobierno la coalición de partidos tras el fin de la dictadura militar.

"El gobierno está absolutamente abierto a soluciones y así he instruido al ministro de Educación, para que en las reuniones con los estudiantes avancen en cada uno de los puntos de la agenda de corto, mediano y de largo plazo, porque estimamos que esto es fundamental para tener un país que dé oportunidades a todos", señaló la presidenta.

Carabineros emitió un comunicado en que expresó que "no acepta ni aceptará que personal institucional incurra en excesos injustificables como los presenciado hoy, que se apartan del reglamento interno y los principios y valores con que formamos a nuestros hombres y mujeres". Además, la institución anunció una investigación interna.

En tanto, la abogada de derechos humanos Alejandra Arriaza denunció hechos de abusos sexuales contra tres adolescentes que representa, ya que en un cuartel del suburbio de Puente Alto se obligó a varias chicas a desnudarse, colocarse en distintas posiciones y se les puso a bailar.

Este día hubo nuevos incidentes con choques en el sector de la Plaza Italia de estudiantes secundarios y encapuchados contra la policía. También disturbios frente a la Universidad de Santiago, al oeste de la capital. En la Universidad de Concepción, al sur del país, se reportaron protestas violentas y una decena de detenidos.

Al tiempo que se desarrollaba la segunda jornada de diálogo en el Centro Cultural de la Recoleta Dominica, al norte de Santiago y lejos del centro donde se produjeron los disturbios del martes, líderes estudiantiles anunciaron que mantendrán la protesta para presionar a las autoridades.

"Hacemos un emplazamiento de aquí al viernes para que se dé respuesta a nuestras demandas, en caso contrario vamos a tomar otro tipo de medidas", anunció la dirigente María Jesús Sanhueza.

Pero otro líder, Juan Carlos Herrera, dijo que de no haber respuesta del Ministerio de Educación convocarán para el lunes a una movilización social nacional, con paros y la incorporación del sector de trabajadores.

Mientras, el gobierno rechazó el ultimátum estudiantil, pero señaló que continuará el diálogo en busca de solución al conflicto.

Los estudiantes piden pases de gratuidad para el transporte público y en relación a los exámenes de acceso a las universidades. Asimismo, una reforma educacional con la anulación de la Ley Orgánica Constitucional de la Enseñanza (LOCE), promulgada en su último tramo por la dictadura de Augusto Pinochet, reforma que implica devolver la educación municipal al Estado.

Mientras, los senadores integrantes del grupo de diálogo con los estudiantes, en su mayoría de la coalición política gobernante, acordaron transformar al Senado en la instancia donde se empiecen a discutir los temas de fondo de la reforma educacional.

Pidieron el respaldo del Ejecutivo a las modificaciones de la Ley de Municipalidades, que gestiona la educación básica y secundaria, a la mencionada LOCE y a la Jornada Escolar Completa con el fin de dar pronta respuesta a las demandas estudiantiles.

Los legisladores, que llamaron a la oposición a "no convertir este conflicto en un tema político y a avanzar en conjunto en una propuesta concreta del Parlamento", estimaron que "es perfectamente posible que en los próximos 90 días se pueda transformar la LOCE y traspasar la educación desde las municipalidades a los gobiernos regionales, porque no se pueden continuar entregando recursos a un sistema que no ha dado resultados" satisfactorios.