Hallan fosa con 54 cadáveres en zona de Irak donde EU atacó bastiones rebeldes
Recibe la resistencia a Annan con un atentado que deja 10 muertos
El secretario general de la ONU visita el país ocupado para ratificar su apoyo al proceso político
Fallecen dos soldados estadunidenses en accidente; operación policial antinsurgente en Baquba
Bagdad, 12 de noviembre. Kofi Annan, secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), realizó hoy su primera visita a Irak desde la invasión estadunidense, en marzo de 2003, para ratificar su respaldo al proceso político y a la reconciliación entre las comunidades sunita, chiíta y kurda.
La llegada de Annan al complejo gubernamental de Bagdad -conocido popularmente como "zona verde"- coincidió con la explosión de un coche bomba en un mercado del sureste de la capital, donde murieron 10 personas y una docena resultó heridas.
Mientras, un total de 54 cadáveres fueron hallados en una fosa cercana a la frontera de Irak con Siria, donde la semana pasada el ejército estadunidense desarrolló una operación contrainsurgente denominada Cortina de Acero.
Citada por el periódico británico The Independent en su edición de este domingo, una fuente de la Media Luna iraquí informó que algunos de los cadáveres corresponden a niños. El comando de la fuerza de ocupación rechazó hacer comentarios de este hallazgo.
A lo largo de la semana, tanto el gobierno iraquí como el ejército de Estados Unidos dijeron haber causado decenas de bajas a comandos de la resistencia atrincherados cerca de los límites fronterizos con Siria.
Un portavoz militar estadunidense en Bagdad reconoció a principios de la semana que cinco civiles fallecieron en la operación, señaló The Independent.
En Kirkuk, norte de Irak, dos soldados estadunidenses fallecieron el jueves pasado en un accidente cuando abandonaban la región oeste, escenario de la operación Cortina de Acero, que requirió de 2 mil 500 marines y unos mil soldados iraquíes.
También en el norte de Irak, más de 600 policías iraquíes lanzaron una operación contra presuntos miembros de la resistencia en la ciudad de Baquba, a unos 60 kilómetros de Bagdad. Un total de 346 personas fueron detenidas.
En este contexto, la visita de Kofi Annan a la capital iraquí fue recibida como un gesto de apoyo a las autoridades políticas del país ocupado, que preparan los primeros comicios legislativos para el 15 de diciembre, con apoyo de Naciones Unidas.
"Irak está en periodo de transición política y debe englobar a todos", dijo el secretario general luego de señalar que la reconciliación en Irak es "esencial".
Annan se entrevistó con representantes de la comunidad sunita, cuyos líderes políticos y religiosos aún no definen públicamente si respaldarán las elecciones legislativas en el país árabe, que estarán sustentadas en la nueva Constitución, ratificada el 15 de octubre pasado en un referendo.
Los sunitas se rehusaron a participar en la elección de la Asamblea Constituyente, celebrada en enero pasado, y aunque no sabotearon el referendo los dirigentes de la comunidad llamaron a votar en contra de esa iniciativa.
El secretario general de la ONU realiza una gira de trabajo por la convulsionada región y el viernes estuvo en Ammán, donde condenó el atentado que causó la muerte a 57 personas.
Pasarela de altos funcionarios
En la semana que concluye, la capital ha recibido a varios dirigentes de la escena internacional, particularmente a representantes de los gobiernos que decidieron y apoyaron la invasión de Irak, en marzo de 2003.
El jueves anterior estuvo aquí el ministro de Relaciones Exteriores de Gran Bretaña, Jack Straw, y el viernes la secretaria de Estado estadunidense, Condoleezza Rice.
A pesar de que Annan se opuso a la invasión de Irak impulsada por Estados Unidos y un conjunto de aliados encabezados por Gran Bretaña, el organismo mundial ha contribuido a la celebración de los procesos electorales y dar impulso a la estabilidad política.
La misión de la ONU imprimió millones de ejemplares de la nueva Constitución en octubre anterior, como paso previo a la celebración del referendo.
Además, el Consejo de Seguridad de la organización votó el martes por unanimidad la ampliación mandato de la fuerza militar multinacional, a petición expresa del gobierno provisional iraquí.
Las actividades de la ONU en Irak se realizan con el apoyo de poco personal diplomático. Las oficinas del organismo fueron objeto de un atentado en agosto de 2003, que causó la muerte de una veintena de personas, incluido el jefe de la delegación, el brasileño Sergio Vieira de Mello.