Usted está aquí: martes 10 de mayo de 2005 Economía Hacienda no ha cobrado $439 mil millones a causa de vacíos legales

Representan 23 por ciento del presupuesto de gastos de la federación para este año

Hacienda no ha cobrado $439 mil millones a causa de vacíos legales

El universo de contribuyentes llegó a 12.9 millones y la recaudación cayó 4.6 por ciento

El saldo de los créditos fiscales refleja la ineficiencia del SAT, afirman diputados del PRD

JUAN ANTONIO ZUÑIGA, VICTOR CARDOSO Y ENRIQUE MENDEZ

A 438 mil 712 millones de pesos ascendió el saldo de los recursos fiscales que, al primer trimestre de este año, la Secretaría de Hacienda no ha podido cobrar por la persistencia de vacíos en la legislación tributaria, indican informes oficiales de esta dependencia.

De esos recursos, la dependencia considera que no va a poder cobrar 137 mil 948.1 millones de pesos, los cuales están clasificados como ''incobrables''. Adicionalmente se encuentran en litigio otros 165 mil 332 millones que, con base en los casos perdidos por Hacienda, difícilmente ingresarán a las arcas públicas.

El monto de los impuestos convertidos en créditos fiscales prácticamente duplica la recaudación tributaria obtenida en los tres primeros meses de este año, la cual fue de 222 mil 777.5 millones de pesos y que a su vez registró una caída real de 4.6 por ciento.

En términos comparativos, los recursos fiscales no cobrados representan 23 por ciento del presupuesto de gastos de la federación en ejercicio, y corresponden a más de 2 millones de ''créditos fiscales''.

De acuerdo con la información oficial, 74.3 por ciento, esto es, casi tres de cada cuatro pesos que no han podido ingresar a la hacienda pública, corresponden a créditos fiscales de empresas; otro 13.7 por ciento de los pagos ha sido eludido por personas físicas con actividad empresarial, y el 12 por ciento restante por personas físicas de altos ingresos.

La Secretaría de Hacienda ha identificado al menos una docena de artículos, tanto del Código Fiscal de la Federación como de la Ley del Impuesto Sobre la Renta y de la Ley de Ingresos, que propician la propensión de los contribuyentes a eludir el pago de sus obligaciones fiscales a través de los tribunales.

De los 9 mil 212 juicios concluidos en primera instancia entre enero y marzo de este año, la autoridad fiscal perdió 36.3 por ciento de ellos, en 18.5 por ciento se obtuvo la ''nulidad para efectos'', con lo que conservaron las facultades para determinar y, en su caso, cobrar los créditos impugnados, y ganó 45.2 por ciento de los casos.

Pero aun así, al 31 de marzo de este año, 137 mil 948.1 millones de pesos se encontraban clasificados definitivamente como ''incobrables'' y otros 165 mil 332 millones correspondían a los créditos cuyo cobro depende de la resolución de los tribunales.

Así, la proliferación de querellas fiscales parece haber anulado cualquier elevación en los ingresos tributarios por el aumento en el universo de contribuyentes a 12.9 millones. También dejó sin efecto los beneficios impositivos que habría dejado el crecimiento económico de ''alrededor'' de 3 por ciento, alcanzado en el primer trimestre. La recaudación tributaria federal registró una caída de 4.6 por ciento en el mismo periodo.

El SAT espera sentado a que los contribuyentes paguen

El grupo parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados sostuvo que el saldo de la cartera de créditos fiscales, que al primer trimestre del año sumó 438 mil 712 millones de pesos, refleja la ineficiencia del Sistema de Administración Tributaria (SAT) en el gobierno de Vicente Fox.

El coordinador del Area de Finanzas Públicas de la bancada, Alfonso Ramírez Cuéllar, señaló que esta tendencia ''denota una ineficiencia total y absoluta del SAT, que en lugar de enfocarse en sus tareas de fiscalización y auditoría espera sentado a que los contribuyentes paguen''.

Refirió que de acuerdo con información de Hacienda, el saldo de los créditos incobrables pasó de 2002 a 2005 de 67 mil 275.9 millones de pesos a 137 mil 948.1 en 2005, lo que representa una variación real de 78.62 por ciento.

Ramírez Cuéllar consideró inaceptable esta situación, pues el saldo de la cartera de créditos fiscales supera al presupuesto anual asignado para los 24 ramos administrativos, donde se encuentran los recursos de las secretarías de Salud, Educación, Desarrollo Social, Agricultura, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, entre otros, que suman una asignación conjunta de 43 mil 567 millones de pesos.

''No está de más recordar que en su informe sobre la cuenta pública 2003, la Auditoría Superior de la Federación encontró que muchos de estos créditos son consecuencia de una mala defensa por parte de la autoridad hacendaria, en los que los servidores públicos incurren en omisión'', expuso.

La tendencia en el Sistema de Administración Tributaria, agregó, es el desprecio absoluto a las actividades de auditoría y fiscalización, y sólo cuando se pone atención en ambos renglones se registra un incremento importante en la recuperación de recursos.

Esto refleja una enorme distorsión en su tarea de recaudación, que se sustenta más en tareas administrativas y en la buena voluntad de los contribuyentes que van a pagar, dijo.

Las deficiencias en el trabajo de auditoría y fiscalización del SAT se reflejan, abundó, en las variaciones que se reportan en el saldo de créditos de controvertidos, pues mientras a marzo de 2002 fue de 133 mil 309 millones de pesos, en el mismo mes de 2003 reportó una reducción de 34 por ciento, y se situó en 92 mil 7 millones de pesos, pero volvió a crecer en 2004 en 66 por ciento y el monto fue de 166 mil 332 millones de pesos, con un crecimiento nominal de 6 mil 531 millones de pesos.

Además, el saldo de la cartera de créditos incobrables muestra un crecimiento sostenido, y explicó que a marzo de este año fue de 137 mil 948 millones de pesos, con un crecimiento anual real de 27 por ciento en 2003, de 22 por ciento a marzo de 2004 y de 15 por ciento en el primer trimestre de 2005. ''Con esto, el saldo en los créditos incobrables alcanzó un incremento de 78 por ciento en términos reales entre 2002 y 2005, y todo se lo debemos a la ineficiencia de la autoridad recaudatoria'', afirmó.

 
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