Habían sido levantados, junto con 23 campesinos, la noche del viernes pasado
Encuentran muertos a ex edil de Soto la Marina y dos de sus hijos
MARTIN SANCHEZ TREVIÑO CORRESPONSAL
Ciudad Victoria, Tamps., 17 de enero. Tres de los 26 campesinos que fueron levantados la noche del viernes pasado en el poblado Enramadas, municipio de Soto La Marina, aparecieron muertos en una carretera federal en los límites de la citada jurisdicción y el municipio de Casas; seis más están desaparecidos. Además, dos hombres fueron ejecutados a tiros en Nuevo Laredo, con lo que suman ya 17 las muertes violentas en esta frontera en lo que va del año.
Los cuerpos de Teodoro Herrera Sosa, ex alcalde de Soto La Marina, así como de sus hijos Jaime y Teodoro, fueron encontrados por elementos de la Policía Ministerial la mañana de hoy a la altura del kilómetro 64 de la carretera Soto La Marina-Casas, esposados. Presentaban impactos de bala calibres .9 milímetros y .38 súper, así como tiro de gracia.
El ex edil priísta había enfrentado un proceso penal por robo de ganado en ese mismo municipio, según obra en los archivos de la Procuraduría de Justicia estatal. Las tres víctimas fueron levantadas la noche del viernes, según declararon vecinos de ese lugar, junto con 23 campesinos, por un comando fuertemente armado que vestía uniformes similares a los de los agentes de la Agencia Federal de Investigaciones.
Sin embargo, el sábado autoridades de la Policía Ministerial del estado informaron que no tenían conocimiento del caso y que no estaban enterados, aunque un día después admitieron que sabían del levantón, porque la comandancia de esa corporación, en Soto La Marina, se había recibido una llamada telefónica, pero que no intervinieron porque "no hubo denuncia formal".
En la llamada les informaron que 17 de los campesinos ya habían regresado a su comunidad rural, pero seis más estaban desaparecidos. Según la dependencia policiaca, las familias de las víctimas no han querido hablar por temor a que sean levantados ellos.
Enramadas y El Chava Gómez
El ex jefe del cártel del Golfo, sucesor de Juan García Abrego, Salvador Gómez Herrera, El Chava Gómez, ejecutado a finales de los años noventa en la ciudad de Matamoros, era originario de Enramadas y es primo de las tres víctimas.
Enrramadas se localiza a la orilla del mar, a unos 30 kilómetros de la carretera costera Matamoros-Mérida, entre los municipios de Soto La Marina y San Fernando, ambos en el estado de Tamaulipas.
Hasta este lunes, cuando se enteró de las ejecuciones, el gobernador Eugenio Hernández Flores lamentó los hechos ocurridos y convocó a una reunión con carácter de urgente al gabinete estatal de seguridad pública, así como a otros funcionarios responsables de dependencias y corporaciones policiacas federales, incluido el Ejército.
Dijo que elementos de la Policía Estatal Preventiva están patrullando el municipio de Soto La Marina y otras regiones de la frontera, aunque "es un problema que no resolverá en 15 minutos ni en una semana".
La ola de ejecuciones en la frontera tamaulipeca continuó: en Nuevo Laredo, la Policía Ministerial informó que dos empleados de un expendio de cerveza fueron ejecutados la noche del domingo de varios tiros. Las víctimas fueron identificadas como Marcos Enrique Tello Flores y José Francisco Flores Tovar.
Los hechos ocurrieron en la calles 15 de Septiembre y Leandro Valle, de la colonia Campestre, en el centro de esa frontera. Con estos hechos suman ya 17 los crímenes violentos en lo que va de enero.
