La propuesta tiende a garantizar la pluralidad de contenidos y ofertas, aclaran

Apremian senadores a concretar la reforma a la ley de radio y televisión

Urge que la nueva normatividad precise el papel de medios públicos, recomienda la directora del Imer Televisa, única empresa en el mundo con 4 canales en VHF: Corral

ALONSO URRUTIA

Los senadores Manuel Bartlett (PRI), Javier Corral (PAN) y Raúl Ojeda (PRD) apremiaron a sacar adelante la nueva Ley Federal de Radio y Televisión, ante la necesidad de regular la competencia en el ramo, impedir los monopolios y acotar los "poderes fácticos" que los medios audiovisuales han alcanzado en la vida política, los cuales amenazan con rebasar a las instituciones.

Al participar en un foro sobre la reforma a esa legislación, coincidieron en que la reforma no va contra el libre mercado; se trata, como sucede en otros países, de regular, para garantizar la diversidad de contenidos y de ofertas televisivas.

En el encuentro, organizado por la Asociación Mexicana de Derecho a la Información y por la Fundación Friedrich Ebert, el subsecretario de Normatividad de Medios de la Secretaría de Gobernación, Ricardo García Cervantes, alertó a los senadores sobre la necesidad de que la construcción de acuerdos en torno a la ley no se circunscriba al Senado, sino que incluya a la Cámara de Diputados, así como a otros actores y destinatarios de la ley, para evitar que, como en otros proyectos, vuelva a tropezar ''con pozos y piedras''.

Por su parte, la directora del Instituto Mexicano de la Radio (Imer), Dolores Beistegui, habló de la obsolescencia de la legislación desde la perspectiva de los medios públicos. Subrayó que el Imer se rige desde los dos esquemas -de permisionario y de concesionario-, los cuales tienen sus particularidades: en el primero se establece que sólo se financiará con recursos fiscales, y el segundo autoriza a buscar ingresos adicionales para garantizar la viabilidad financiera. Además, se deja ambiguo si los programas deben buscar la competitividad con otros medios privados o priorizar el contenido educativo. Habló de la necesidad de crear mecanismos que fortalezcan a los medios públicos y su papel en el contexto de la comunicación.

Ojeda, por su parte, recordó que la ley vigente se hizo en un contexto -de concentración y tecnológico- muy diferente al actual, así como en un esquema regulador que lo hacía muy dependiente del Ejecutivo y de los intereses de los concesionarios. De igual forma, no consideraba ninguna manera de prevenir el monopolio.

Dijo que el proyecto que se impulsa pretende regular la competencia y evitar los monopolios, sin que ello implique que no se mantenga dentro del esquema de mercado. Advirtió que es necesario que los partidos asuman la necesidad de la reforma y de limitar los poderes fácticos que han alcanzado los medios de comunicación que ponen en riesgo a la joven democracia mexicana.

Corral advirtió que el anteproyecto de dictamen tiene, entre otros sustentos, algunas modificaciones a la legislación de Estados Unidos, que limita a una estación la presencia de las cadenas nacionales en VHF. El caso de México, donde Televisa tiene cuatro, es único en el mundo. Destacó algunas innovaciones de la propuesta, como el planteamiento de que ninguna empresa podrá mantener el control superior a 35 por ciento de las estaciones de radio o televisión en una plaza; que 50 por ciento de los contenidos de cada estación sea obligatoriamente nacional, y de esta proporción 20 por ciento sea producción independiente.

Destacó que se busca garantizar un auténtico derecho de réplica a los ciudadanos que se sientan agraviados por un medio de comunicación, pues el actual que se incluyó en el reglamento es "seudo derecho".

Bartlett subrayó que en la actualidad no sólo la ley en la materia es vieja, sino también "nadie la aplica". Recordó que cuando estuvo en la Secretaría de Gobernación se impulsó el fortalecimiento de medios públicos (Imevisión e Imer), tendientes a garantizar una oferta con ciertos valores indispensables, pero cuando llegó la oleada neoliberal se procedió a la privatización.

Mencionó que es viable una nueva ley, porque esto ''no es nada del otro mundo, es de este mundo, del mundo democrático'', y para eso estamos construyendo los acuerdos.