La Máquina recibe esta tarde a la Autónoma de Guadalajara en el estadio Azul

Ante Tecos huelo la victoria, afirmó el técnico de Cruz Azul, José Luis Saldívar

Ricardo Osorio y Marcelo Delgado podrían reaparecer tras superar lesiones

MARLENE SANTOS A.

Para José Luis Saldívar la tercera sería la vencida; esta tarde ante Tecos espera su primer triunfo con La Máquina. "Yo creo que sí, no me gusta adelantar, hay respeto por el rival, pero yo siento muy cerquita, huelo cierta victoria", señaló ayer tras el entrenamiento.

Sus bases, explicó, son el trabajo realizado en las últimas horas: "mucho orden, sobre todo en la defensa, trabajos claros, explicaciones sencillas. Lo más digerible, que le quede claro hasta el último jugador, para no dar lugar a excusas de que no se entendió". Incluso, aseguró que el ánimo está muy repuesto. Es decir, todo listo.

En la sala de conferencias de La Noria, Saldívar manifestó que entre los objetivos está no terminar como colero general, pues es muy feo ver a Cruz Azul en el último lugar, sobre todo, porque los puntos que logren rescatar les darán tranquilidad en el tema del descenso, "queremos alejarnos lo más posible para que el torneo siguiente no carguemos con esa presión", sostuvo.

Además, la recuperación de los lesionados es otro motivo para reanimar al grupo, pues reiteró que Ricardo Osorio y Marcelo Delgado ya están listos para jugar, aunque no quiso adelantar si participarán frente a la UAG, pero finalmente son recursos para enriquecer sus variantes, admitió. Asimismo, dijo que Miguel Zepeda será dado de alta la próxima semana y Mario Ortiz también va en franca mejoría.

Saldívar no quería revelar el periodo por el que se contrató con Cruz Azul, "finiquité el de Oaxaca y firmamos otro contrato acá, pero no les voy a decir por cuánto tiempo, no tiene sentido. Acuérdense, una vez le dijeron a (Víctor Manuel) Vucetich que tenía 10 años con Tecos, pero tuvo una mala racha y salió"; sin embargo, terminó informando que firmó por lo que resta de este y el siguiente torneo.

Luciano Figueroa reconoció que la directiva "ha cumplido con nosotros, pero nosotros no hemos cumplido en la cancha", pues admitió, al igual que varios de sus compañeros, que la mala campaña del plantel no ha afectado sus bolsillos y siguen cobrando íntegros sus salarios.

De igual forma desechó su traspaso a Europa. Luciano precisó que su papá, quien también es su representante, no le ha comentado nada sobre algún acercamiento formal de parte del equipo ibérico Villarreal. Y aunque sueña con jugar algún día en España o Inglaterra, aseguró encontrarse muy cómodo en La Máquina, a pesar de que "la situación no es muy linda. Pero mi cabeza está aquí", subrayó.