La Orquesta Sinfónica Infantil de México comenzará periplo en Bellas Artes

Niños músicos preparan gira con instrumentos viejos y prestados

Falta de higiene y mantenimiento en escuelas, problemas de los de aliento metal y madera

Realizarán el estreno mundial de Suites aventuras, de la mexicana Graciela Agudelo

ERICKA MONTAÑO GARFIAS ENVIADA

Oaxtepec, Mor., 16 de julio. Con instrumentos viejos, prestados, de baja calidad y en malas condiciones, la Orquesta Sinfónica Infantil de México (OSIM) prepara su cuarta gira nacional, que iniciará el domingo 27 en el Palacio de Bellas Artes, con dirección de Sergio Ramírez Cárdenas.

Esta vez, explica el director, el programa es más complicado que el de años anteriores y está integrado con obras de Bizet, Dvórak, Prokofiev, Alberto Ginastera, José Pablo Moncayo, Manuel Enríquez y el estreno mundial de Suites aventuras, de Graciela Agudelo.

Son 162 niñas y niños de 11 a 15 años (aunque hay de 17 años para quienes tocan instrumentos que precisan ciertas ventajas, como la estatura), de diferentes estratos sociales que provienen de distintos estados y que durante dos semanas ensayan ocho horas diarias con miras a su presentación en el Distrito Federal y otras ciudades dentro de la gira que terminará el 8 de agosto.

El aerodinámico, una rareza

Muchos de los niños músicos llegan con sus propios instrumentos, algunos son de sus abuelos; a otros se los prestan las orquestas, bandas o escuelas en las que tocan, o bien se los facilitan instituciones como el Centro Cultural Ollin Yoliztli o la Orquesta Sinfónica Carlos Chávez.

Los instrumentos de esas instancias culturales corresponden a los de imposible adquisición por los menores, como ''un juego de timbales, un bombo sinfónico, un arpa de concierto", señala Ramírez Cárdenas, y subraya que pese a sus condiciones, se trabaja mucho para lograr un sonido óptimo, a lo que se añaden las ganas que ponen en ensayos y conciertos.

''No podemos esperar que los niños tengan un sonido como de adultos y menos con instrumentos de esa calidad. Algunos son realmente corrientes y están hechos para estudiantes, e inclusive están por debajo de su nivel. Pueden trabajar, estudiar y tocar las notas. Lo que hacemos es agrandar la orquesta para sustituir dos cosas: primero, son niños en formación que carecen de un gran sonido instrumental, y segundo, que muchos instrumentos nunca van a sonar con la fuerza requerida", agrega el director en entrevista.

Para evitar mayores contratiempos hay dos mesas colocadas en el salón donde ensayan. En la primera trabaja David Abarca, restaurador de los instrumentos de cuerda, y en la otra Gerardo Ramírez, quien se encarga de los de aliento.

Una de las más solicitadas es la de cuerdas: llega un violín sin soporte para la barbilla, otro se desajustó, uno más descansa sobre la mesa en espera de que el restaurador tenga tiempo para poner las cosas en su lugar. ''Mi especialidad es sacarle el sonido óptimo a los instrumentos más corrientes del mundo. Los traen en muy mal estado, malos del puntal, de las cuerdas, y entonces hay que estar ajuste y ajuste para sacarles provecho".

Durante su trabajo con la OSIM llegan casos raros. Un ejemplo ocurrió el año pasado, con un violín al que bautizaron el aerodinámico, ''parecía hecho en una fábrica de plástico, pero sonaba maravillosamente".

A veces hay que desarmarlos y armarlos, y en otras, los pequeños músicos ''descomponen adrede sus instrumentos porque están cansados, vienen conmigo y se salen un rato del ensayo. Desde ahí se sabe quién tiene amor a su instrumento, se ve quiénes van a ser músicos y quienes no".

En el caso de los instrumentos de aliento los problemas principales son causados por el descuido, la falta de higiene, el mantenimiento que les dan de los municipios y escuelas, y entonces hay que darles servicio completo, explica a su vez Gerardo Ramírez.

La cuarta gira nacional de la OSIM comenzará el día 27 a las 12:30 horas, en el Palacio de Bellas Artes; después irá a Zacatecas, Durango, Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas y concluirá el 8 de agosto, a las 18 horas, en el Centro Nacional de las Artes.