Rocío Sánchez

Josué Alberto Quino Andrade nació en el puerto de Veracruz hace 44 años, y desde hace 17 vive con el VIH/sida. Su gran pasión es el teatro y mediante este arte ha encontrado la manera de transmitir mensajes de prevención contra el VIH. Josué ahora ha decidido cambiaar de escenario para lanzarse como candidato plurinominal a diputado local del Distrito Federal por el Partido México Posible.

"En 1986 supe que tenía el VIH. Hoy no me interesa saber cómo me infecté, sino seguirme cuidando. En ese tiempo lo único que yo sabía era que se llamaba sida, que era el cáncer rosa y que sólo les daba a los homosexuales extranjeros. Yo no había tenido relaciones sexuales con ningún extranjero ni había viajado fuera del país, por lo que pensaba que no me podía dar a mí.

"Cuando mi médico me dijo que tenía el virus los oídos me zumbaron y en medio de ese zumbido enorme pude oír que me decía: 'no te vas a morir, vamos a matar el bicho, no vamos a dejar que te ataque'. Me bloquié; la única modificación que hice en mi vida fue incorporar permanentemente el condón. Entendí que lo malo no es vivir con el VIH, lo malo es no saberlo. Si vives con el virus no hay bronca, hay manera de controlarlo, y si no vives con el virus hay que tomar una actitud como si vivieras con él, cuidarte.

"En ese tiempo los científicos juraban que una persona con VIH no vivía más de cinco años, y no era de dudarse, pues muchos amigos míos estaban muriendo. Cerca de cumplirse esos cinco años comencé a cerrar círculos con mis amigos y mi familia, preparándome para morir. Y nada que me muero.

"Diez años después los médicos decían que el virus no permitía a nadie vivir más de diez años. En 1996, en vez de morirme, nació Teatro y Sida, A.C., con lo que inicié mi lucha a favor de la prevención. Comprendí que estaba cada vez más vivo, con más ganas de amar, de trabajar. He conducido programas radiofónicos, he montado obras de teatro, escribí un guión cinematográfico. Trabajo no me ha faltado.

"Ese mismo año comencé a tomar medicamentos, 24 pastillas diarias. Mi salud se desquició: dolores de cabeza, vómito, sueño a todas horas. Fueron años los que tardó mi organismo en adaptarse. Finalmente comprendí que no importa lo que tengas que luchar físicamente, porque después el resultado es positivo.

"Como aspirante a un puesto político busco ampliar mi labor de informar y prevenir. Josué Quino y Benjamín Delga-do tienen que llegar a la Asamblea de Representantes para conseguir medicamentos gratuitos para todos, creación de clínicas especializadas, más especialistas en VIH/sida, convencer a la gente que se necesita ampliar el trabajo contra la discriminación. Si no llegamos no importa, porque México Posible destina 40 por ciento de sus recursos a proyectos sociales. Vamos a presentar un proyecto para continuar con el Centro de Atención Integral para Adolescentes y Jóvenes Gays, Lesbianas y Bisexuales de México (Caipaj) y otro para un nuevo programa radiofónico de información y prevención del VIH/sida. Sería muy bueno llegar, pero si no es así, continuaremos trabajando."