El Prodh pide respuestas a la PGJDF

El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh) emplazó ayer a la fiscalía especial y a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), que investigan la muerte de Digna Ochoa, a que consideren las deficiencias señaladas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y respondan si en estas condiciones es factible dar una conclusión creíble sobre el caso.

Si las deficiencias de la investigación impiden la posibilidad de un resultado creíble, la organización exigirá a la fiscalía especial, a la procuraduría capitalina y al gobierno federal que asuman su responsabilidad jurídica y política ante la sociedad nacional e internacional.

"Si ese material probatorio está conformado por elementos que generan duda en cuanto a su veracidad, entonces siempre quedará la sospecha sobre la contundencia de la resolución", afirmó el director del Prodh, Edgar Cortez.

En un comunicado expresó que resulta "altamente preocupante" el estado que guarda el caso, a pesar de los apoyos y medios necesarios que tanto el gobierno como la comunidad nacional e internacional han aportado para su impulso.

Recordó que el informe confirma las preocupaciones que desde el inicio de la investigación fueron manifestadas por el centro y que han sido motivo de señalamientos negativos respecto a la procuración de justicia en México, principalmente en lo que se refiere a los adecuados métodos de investigación indagatoria del crimen.

Ante ello, pidió una respuesta de la PGJDF sobre la forma como atenderá e incorporará a la investigación las conclusiones que le fueron formuladas por la CIDH, y de qué manera indagará y sancionará las fallas cometidas por los equipos responsables.

Dijo que al emitir su resolución final la fiscalía especial debe satisfacer una serie de criterios mínimos: que agote todas las líneas de investigación, que esté basada en la existencia de pruebas sólidas y contundentes, y que la conclusión sea explicable dentro del contexto en el cual sucedieron los hechos. CLAUDIA HERRERA BELTRAN