Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 30 de enero de 2003
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Economía

MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Casi dos décadas sin crédito de los bancos a la producción

La banca moderna, asignatura pendiente

SIGUEN LAS BUENAS noticias sobre la decidida aportación de la "moderna" banca que opera en el país al crecimiento nacional, por medio del masivo otorgamiento de crédito a los sectores productivos.

DE ACUERDO CON cifras del Banco de México, al cierre de 2002 el financiamiento total del sistema bancario comercial otorgado al sector privado "equivale a tan sólo 11.7 por ciento del producto interno bruto, siendo éste el coeficiente más bajo desde 1989".

SIN EMBARGO, ACOTA el propio banco central, "de no considerarse la cartera asociada a programas de restructura, el financiamiento bancario al sector privado representó 9.1 por ciento del PIB en 2002, nivel similar al observado a mediados de la década de los ochenta".

EL CREDITO BANCARIO a la vivienda y a los intermediarios no bancarios continúa estancado, mientras destaca el vigor del canalizado al consumo, el cual en diciembre pasado registró una variación real anual de 36.2 por ciento. En contraste, el canalizado a la vivienda cayó 11 por ciento.

LA ANTERIOR ES LA estadística más reciente que aporta el Banco de México, pero no la única para hacer el recuento de los daños. De acuerdo con información de la propia institución, en 1994, último año del sexenio de la "modernidad", el crédito bancario representó 73 por ciento del total del financiamiento canalizado a la economía del país. El otro 27 por ciento era otorgado por instituciones financieras no bancarias, como las Sociedades Financieras de Objeto Limitado (Sofol), arrendadoras y afianzadoras, entre otras. En 2002 la relación fue distinta: ese año sólo 43.7 por ciento del crédito correspondió a la banca comercial (ya en propiedad de extranjeros, salvo Banorte) y 56.3 estuvo a cargo de instituciones financieras no bancarias (La Jornada, Roberto González Amador)

EN 1995, EL AÑO DE LA gran crisis, la banca privada -todavía en manos de la nueva oligarquía financiera- aportaba 64 por ciento del crédito total a este sector, proporción que se desplomó, siete años después, a casi la mitad.

EN EL PRIMER TRIMESTRE del año pasado, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado -organismo del Consejo Coordinador Empresarial- reveló que en 2001 el monto del financiamiento aportado por el sistema bancario comercial a las actividades productivas del país equivalía, por aquellas fechas y en términos reales, a una cuarta parte del registrado en diciembre de 1994, mientras en 2001 el grado de penetración de dicho sector en la economía mexicana, medido como proporción del financiamiento bancario en el producto interno bruto, fue de 6.8 por ciento contra 32.5 por ciento en 1994, año en el que el sector financiero otorgaba crédito por 32.5 centavos por cada peso producido en la economía, mientras ahora la proporción es de sólo 6.8 centavos por cada peso. Las cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía en Informática aumenta un poco la relación, es decir, 6.6 por ciento para 2001 y 35 por ciento para 1994.

HOY, EL CONSEJO Coordinador Empresarial es presidido por Héctor Rangel Domene, ex presidente de la Asociación de Banqueros de México, quien al asumir ese cargo en 2000 aseguró -por primera ocasión desde que estalló la crisis de 1995-, que el financiamiento del sistema bancario al sector privado "tendrá en 2001 un crecimiento superior al del producto interno bruto (4.5 por ciento, según la previsión original del gobierno del cambio) y avanzará a una tasa real de 6 por ciento a lo largo de ese año". De todos son conocidos los resultados económicos y crediticios en el primer año de la administración Fox.

POR AQUELLAS FECHAS, Rangel Domene aseguraba que "la banca está completamente capitalizada y saneada... La crisis del sistema bancario es cosa del pasado... Ningún foco rojo o amarillo hay en la banca comercial", situación, que en los hechos, de nada sirvió para que se reactivara el crédito productivo.

TAMBIEN LA CORREDURIA Standard and Poor's aseguraba que desde comienzos de 2001 el sistema bancario estaba "listo para iniciar el otorgamiento de crédito... Las tasas de interés disminuyeron en forma importante, llegando a sus niveles más bajos en los últimos años y ante este escenario se podía esperar que expandieran sus carteras de crédito y generaran nuevos negocios". Tampoco las proyecciones de esa institución se cumplieron.

EN LOS HECHOS, reconoció Standard and Poor's, "poco sucedió y la demanda de crédito se mantuvo débil todo el año... La desaceleración económica ha vuelto la situación incierta, si no es que difícil, tanto para los consumidores como para las compañías. Muchos individuos fueron cautelosos en lo que se refiere al futuro y no hubo tanta voluntad de tomar crédito nuevo. Cabe aclarar que aunque los créditos de tarjetas bancarias y otros préstamos al consumidor (por ejemplo, financiamiento de autos, préstamos personales) sí aumentaron en forma importante en términos reales -40 por ciento sobre una base anual a septiembre de 2001- este renglón creció sobre la base de una cartera que todavía es muy pequeña, es decir, los préstamos al consumo apenas representan 8 por ciento de la cartera de créditos total de los bancos".

UNA DECADA DESPUES, la prometida banca "moderna" y promotora del crecimiento económico nacional, se mantiene como asignatura pendiente.

Las rebanadas del pastel:

QUIENES PENSABAN QUE los defraudadores de Enron ya la habían librado, la agencia Dow Jones informó ayer que los acreedores de la trasnacional intentan recuperar más de mil millones de dólares que gentilmente les fueron arrebatados. En un documento presentado ante la Corte de Bancarrotas de Estados Unidos en Manhattan, el comité oficial de acreedores no garantizados en el caso del Capítulo 11 de Enron solicitó la aprobación de esa instancia legal para demandar a Whitewing LP, Osprey Trust y a otras entidades que en conjunto conforman la denominada estructura Whitewing. La medida representa el primer intento legal de los acreedores de Enron para determinar los activos que yacen bajo el laberinto de estructuras de sociedades creadas por Enron. El comité de acreedores afirma que los activos considerados en el acuerdo Whitewing deberían incluirse dentro de las posesiones de Enron debido a que ''Whitewing fue, y es efectivamente parte de Enron'', según los documentos de la corte, anota Dow Jones.

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