Mimexca, otra organización que trianguló fondos para la campaña presidencial de Fox

La fundadora de la agrupación, Martha Real, desapareció cuando se intensificaron las pesquisas contra los Amigos de Fox, afirman dirigentes perredistas de California y Texas

RENATO DAVALOS

La historia de la triangulación de fondos extranjeros a la campaña de Vicente Fox, provenientes de agrupaciones empresariales en Estados Unidos como Migrantes Mexicanos por el Cambio (Mimexca), pasa por su fundadora, Martha Real, con residencia desconocida desde que se disolvió la agrupación, el año pasado, cuando se intensificaron las indagatorias y denuncias en torno a los Amigos de Fox.

Los cuantiosos recursos fueron gestionados durante 1999 y 2000 por Real y el enlace fue Juan Hernández, ex responsable de la Oficina de la Presidencia para la Atención de Migrantes en el Exterior, señalaron ayer, en rueda de prensa, Felipe Aguirre y David Miranda, dirigentes perredistas de California y Texas, respectivamente.

Aguirre y Miranda anticiparon que, en una reunión que tendrán el próximo primero de septiembre con el procurador de California, William Dally, solicitarán que se abra una investigación sobre el caso, porque se violaron normas establecidas por la comisión federal electoral estadunidense que prohíben la emisión de fondos a otros países con fines electorales, explicaron.

Mimexca fue una agrupación que en su corta existencia aglutinó a empresarios, fundamentalmente de origen mexicano, en Estados Unidos.

Fue fundada en 1998 y acunada en Fresno, California. Vicente Fox, entonces gobernador guanajuatense, concurrió al nacimiento del grupo empresarial. Luego regresó a ese condado en 2000, cuando era presidente electo, aseguraron Aguirre y Miranda.

Durante 1999 y 2000 Fox recibió "cuantiosos recursos" para su campaña presidencial, derivados de los enlaces que habían tendido tanto Martha Real como Juan Hernández. Ello explica los viajes constantes que desde entonces hacía Hernández a territorio estadunidense. "A nosotros también nos pasaron la charola, pero no hicimos donaciones", comentaron.

Pero los vínculos de Hernández y Real se remontan a años atrás. Desde su oficina en el palacio de gobierno de Guanajuato, Fox decidió en 1997 la creación en cinco ciudades estadunidenses de las llamadas Guanajuato trade office, que tenían como propósito la promoción comercial y económica de la entidad.

Aguirre y Miranda relataron que esas oficinas fueron abiertas en Los Angeles, Dallas, Washington, Nueva York y Chicago. Martha Real fue designada como responsable del despacho angelino y Juan Hernández como titular en la oficina texana, donde consolidó los vínculos con el entonces gobernador George W. Bush, a quien presentaría posteriormente con Fox.

Fueron públicos los enlaces que desde entonces Real y Hernández empezaron a tejer y que luego se traducirían en apoyos económicos a la campaña de Fox, señalaron.

"No sabemos con precisión los fondos que habrían sido canalizados durante 1999 y 2000, pero sí tenemos conocimiento de que se hicieron las transferencias, sancionadas por la legislación estadunidense", añadieron.

"Estaremos atentos a las solicitudes y requerimientos informativos que nos hagan los consejeros del Instituto Federal Electoral, quienes próximamente viajarán a Estados Unidos para profundizar en este asunto", aseveraron los perredistas.

Consecuentemente, Hernández tiene que responder muchas preguntas en torno a esos financiamientos que fluyeron a la campaña foxista. El paradero de Martha Real es desconocido, desde que el año pasado decidió apresuradamente la disolución de Mimexca.

"Esperamos que el procurador Dally considere la solicitud que le haremos en el próximo encuentro", confiaron. Además, Hernández tiene que rendir un informe por el repentino abandono de la oficina que encabezaba, pues fue desaparecida sin consulta alguna.

Aguirre y Miranda criticaron también la política foxista en el ámbito migratorio. Su estrategia ha sido errática y poco consistente, y su preocupación se centra en la línea efectista, de golpes publicitarios y de una búsqueda de popularidad personal, señalaron.

"Está aún pendiente el voto que prometió para los mexicanos en el extranjero. Tampoco ha cambiado la atención y protección consular. No ha habido ni la decisión política ni los recursos económicos indispensables, pese a los más de 10 mil millones de dólares que se envían por remesas de Estados Unidos a México."

Fox ni siquiera ha tenido el valor de levantar el teléfono para llamar a Bush o a Rick Perry, gobernador texano, para exigir que se suspenda la ejecución de Javier Suárez, programada para este miércoles, establecieron.

Finalmente, anticiparon que el próximo 26 de septiembre habrá una gran marcha en la capital estadunidense de 100 organizaciones de migrantes para demandar la regularización de tres y medio millones de mexicanos que viven allá.