Presentaron Donde nacen las aguas, antología del poeta nacional de Cuba

Nicolás Guillén dejó un canto para la humanidad

ERICKA MONTAÑO GARFIAS

El Fondo de Cultura Económica presentó el libro Donde nacen las aguas, antología del poeta cubano Nicolás Guillén, como parte del homenaje que se ofreció este jueves al autor de Sóngoro cosongo en la embajada de Cuba en México, al cumplirse el centenario de su natalicio. Al finalizar la ceremonia la subgerente de Proyectos Especiales del FCE, María del Carmen Farías, anunció la publicación en breve de otra antología poética, la del cubano Cintio Vitier, galardonado con el Premio Juan Rulfo 2002.

Donde nacen las aguas, título tomado del poema Llegada, reúne más de 200 textos del poeta nacional cubano, quien tuvo ''varias facetas simultáneas: fue un autor afrocubano, un poeta caribeño y un poeta social. Cuba fue su razón de ser, su motivo máximo de expresión, pero la vio siempre insertada en un contexto caribeño, en el semicírculo de islas que comparten la raíz africana", señaló en su discurso el escritor y periodista cubano Lisandro Otero, quien subrayó que Guillén, como José María Heredia y José Martí, ''siente a la patria como una necesidad del alma".

Con la muerte de Guillén, el 16 de julio de 1989, ''desapareció el último de los grandes, de los fundadores, de los que ayudaron a entender mejor a los latinoamericanos la importancia de ser ciudadanos de nuestra América", finalizó Otero.

El embajador de Cuba en México, Jorge Bolaños, se refirió a aspectos personales del poeta nacido en Camagüey, como su labor en una imprenta, ya que, a la muerte de su padre, debió contribuir a la economía familiar. Recordó que Guillén fue periodista y colaboró en diarios, revistas, semanarios, además de su nexo con el Che Guevara.

Destacó que Guillén es un poeta ''no sólo de Cuba, sino de todos los pobres de nuestro tiempo; por eso su existencia va más allá de un siglo para habitar en la eternidad y el canto que nos dejó es nuestro canto de hoy y ha de ser el canto de la humanidad".

El escritor e investigador cubano Osmar Sánchez manifestó que ''esta antología se orienta a poner de relieve y a devolvernos un Guillén clásico que debe leer cada uno por sí mismo". La antología fue compilada por Norberto Codina y Nicolás Hernández Guillén, nieto del representante de la poesía negra antillana.