La Jornada 6 de abril de 1997

Tenía 68 años; no resistió un segundo infarto en 16 días

Jesusa Cervantes y Andrea Becerril Ť A las 9:50 de la mañana de ayer, el corazón de Heberto Castillo dejó de latir.

Con 68 años a cuestas, lastimado por golpes, encarcelamiento, los efectos de una vida política activa y posiciones críticas ante el gobierno, el senador de Ixhuatlán de Madero, Veracruz, enfrentó una operación a corazón abierto.

Héctor Rodríguez Cuevas, su médico particular, dijo que la causa de la muerte fue un infarto al miocardio, el segundo en los últimos 16 días.

Desde la noche del pasado viernes, su esposa María Teresa Juárez Carranza y sus hijos Heberto, Javier, Héctor y Laura Itzel fueron advertidos de la extrema gravedad del político.


El luchador social Heberto Castillo, durante
una gira por Querétaro.
Foto: Raúl Ortega

El que fuera secretario particular de Lázaro Cárdenas, había llegado de Jalapa el pasado 17 de marzo, cuando sintió fuertes dolores en el pecho. En esa fecha fue internado en el hospital Angeles.

A consecuencia de la diabetes que padecía, al senador veracruzano se le bloquearon las arterias coronarias el pasado día 20 de marzo y debió ser sometido a una intervención quirúrgica.

Luego de ella, se mantuvo estable por unos días; su médico anunció el lunes pasado que probablemente pasaría de terapia intensiva a terapia intermedia, pero una infección pulmonar complicó el caso.

El miércoles 2 de abril circuló el rumor de su gravedad. Su hija Laura Itzel informó en esa fecha que Castillo Martínez se mantenía estable y su recuperación era lenta. Incluso el Senado de la República emitió un comunicado donde anunciaba su recuperación. El jueves, Heberto Castillo se agravó y al día siguiente los médicos manifestaron pocas esperanzas de salvarle la vida. Finalmente, la mañana de ayer sábado murió el senador.

Heberto Castillo nació en Ixhuatlán, Veracruz, en 1928, estudió ingienería civil en la Universidad Nacional Autónoma de México y se graduó en 1953, el mismo año en que se casó.

En 1961 formó parte activa del Movimiento de Liberación Nacional; en 1968, siendo académico, participó en el movimiento estudiantil y terminó en la cárcel de Lecumberri, en la crujía ``M'', desde donde impartía clases de matemáticas y ayudaba a estudiantes a continuar sus estudios. Luego de dos años y cuatro meses de prisión, Castillo Martínez quedó en libertad por el desistimiento de la acción penal por parte del gobierno.

En los setentas, el también ex diputado federal fundó el Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT) y en 1987 logró la fusión de varios organismos políticos que confluyeron en el Partido Mexicano Socialista (PMS).

Con esa organización fue candidato a la Presidencia de la República y posteriormente declinó en favor de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano en 1988.

A raíz de los resultados de esos comicios convocó junto con otros políticos e intelectuales a la formación del Partido de la Revolución Democrática.

Heberto Castillo fue, además de político, inventor, pintor e incursionó con éxito en la literatura. Buscó la gubernatura de Veracruz por el PRD y formó parte de la dirigencia nacional del mismo partido.

Creador de la famosa tridilosa, material que revolucionó la ingeniería, Castillo Martínez logró que su invento fuera reconocido y aplicado en varios países.

En 1975, escribió el libro ¿Por qué un nuevo partido? junto con Francisco José Paoli Bolio, quien ayer estuvo presente en la capilla funeraria donde fueron velados los restos del senador. La última vez que Castillo Martínez habló con sus hijos les comentó que estar en el hospital era más tortuoso que estar en Lecumberri.

Por otro lado, la dirigencia del PRD anunció que como parte del luto se suspenderán por tres días todas las actividades de ese partido y las de proselitismo de sus candidatos. Hoy en todos los comités estatales del país se brindará un homenaje póstumo a Heberto Castillo y en el Palacio de las Bellas Artes se hará un reconocimiento nacional a su trayectoria.

A las once de la mañana está programado un homenaje de cuerpo presente en el Senado de la República, en la calle de Xicoténcatl, y a las 13:00 horas su cuerpo será cremado en el Panteón Español.